Las andanzas de nuestro corresponsal Omarson Gourmet lo llevaron por sitios diversos de nuestra querida metrópolis. A continuación, sus opiniones acerca de Il Vero Mangiare, La Mamma Rosa, Los Chanchitos, y Sottile.
Deambulando por la zona de Villa Crespo, Omarson recaló en un par de bodegones que lo dejaron satisfecho sin dañar su bolsillo. El primero es
Il Vero Mangiare, cerca de Juan B. Justo y Avenida San Martín.
La orden para el mozo consistió en agua sin gas, vino tinto por copa Crota, chivito (no la versión uruguaya; chivito auténtico) y papas a la española/italiana. Otras opciones de la carta (muy accesibles todas) eran ranas, caracoles, conejo, además de picadas y pastas como corresponde a la nacionalitá. "Las papas a la española/italiana riquísimas", nos cuenta Omarson. "El chivito se resistió un poco... pero lo vencí. Para terminar, un flan bien casero. Con el plato casi más caro de la carta ($ 250) el costo final fue de $ 419. Esto incluyó servicio de mesa ($ 15), agua ($ 40), copa de tinto ($ 54), flan ($ 60) y chivito al ajillo ($ 250). Sin el flan ni el tintillo hubieran sido $ 300. Es barato. La calidad de atención, muy buena, y el tiempo de espera ni se notó". Comentario al margen: "Recién pasaron con un montón de platitos... era la Picada de la Casa para dos. Con burrata, chambota y otras exquisiteces".
La segunda parada en la zona de Villa Crespo fue
La Mamma Rosa, en Julián Álvarez y Jufré. La opción elegida fue el menú ejecutivo que contaba con arroz con pollo como plato principal. "Muy buen plato", relata Omarson. "Un clásico. Abundante y con la cocción justa, tanto para el arroz como para el pollo. Eran tres piezas enteras (no requechos): pata, muslo y cadera. O sea un verdadero cuarto de pollo. Muy bien cocido y muy sabroso. De postre, otro clásico: flan casero. Bebida: agua sin gas. Todo acompañado por una panera abundante y con pan de pizza. Para picotear durante la espera del plato: dos grandes fetas de muy buena mortadela, posiblemente italiana. El costo final, más que apropiado: $ 185 + propina. La atención, muy buena; la espera, necesaria; el ambiente, agradable".
Una vuelta por Caballito (obligada por un trámite en Edesur) fue la oportunidad para conocer la parrilla
Los Chanchitos, frente al Parque Centenario. El menú ejecutivo degustado en esta ocasión contó con una ensalada, matambrito de cerdo, papas españolas, agua, tiramisú y café. Todo por $ 250. "Ah, y una panera súper!", agrega el corresponsal.
Alejándose un poco de los barrios porteños, Omarson recaló en Lomas del Mirador, en donde visitó
Sottile, un clásico para los laburantes de esa zona. "Abundante panera que incluye pan de pizza y tostadas al olio, quesito blanco para untar, bebida, plato principal y postre. Elegí el pollito grillado con arroz y arvejas a la crema", nos cuenta nuestro enviado especial. "Todo bien. Salvo que se demoraron un poquito con la cuenta. Aceptan tarjeta aún pidiendo menú. El precio fue de $ 170. Mi calificación 7/10".
En cuanto resolvamos ciertas cuestiones de cachet, seguiremos recibiendo los exclusivos aportes de Omarson Gourmet.
Más imágenes...
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| El chivito se resistió en Il Vero Mangiare, pero fue vencido |
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| Flan bien casero en Il Vero Mangiare |
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| Preparación a la vista en Il Vero Mangiare |
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| Entrada de la cantina Il Vero Mangiare |
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| Ambiente de Los Chanchitos |
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| Ambiente de La Mamma Rosa |
Deambulando por la zona de Villa Crespo, Omarson recaló en un par de bodegones que lo dejaron satisfecho sin dañar su bolsillo. El primero es Il Vero Mangiare, cerca de Juan B. Justo y Avenida San Martín.
La segunda parada en la zona de Villa Crespo fue La Mamma Rosa, en Julián Álvarez y Jufré. La opción elegida fue el menú ejecutivo que contaba con arroz con pollo como plato principal. "Muy buen plato", relata Omarson. "Un clásico. Abundante y con la cocción justa, tanto para el arroz como para el pollo. Eran tres piezas enteras (no requechos): pata, muslo y cadera. O sea un verdadero cuarto de pollo. Muy bien cocido y muy sabroso. De postre, otro clásico: flan casero. Bebida: agua sin gas. Todo acompañado por una panera abundante y con pan de pizza. Para picotear durante la espera del plato: dos grandes fetas de muy buena mortadela, posiblemente italiana. El costo final, más que apropiado: $ 185 + propina. La atención, muy buena; la espera, necesaria; el ambiente, agradable".
Una vuelta por Caballito (obligada por un trámite en Edesur) fue la oportunidad para conocer la parrilla Los Chanchitos, frente al Parque Centenario. El menú ejecutivo degustado en esta ocasión contó con una ensalada, matambrito de cerdo, papas españolas, agua, tiramisú y café. Todo por $ 250. "Ah, y una panera súper!", agrega el corresponsal.
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